Voy a por la rueda, la instalamos. Sillin a la medida de Yoav, mochila, herramientas, bocadillos de pollo comprados en Tesco. Nos dirigimos a la parada, alli hay un moro de Irak, y justo, como que lo veia venir, me pregunta que de donde soy: de España. La tipicas palabras en español, buen royo, etc. Luego le pregunta a Yoav que de donde es. Adivina, pues no se, pues de Israel. Y justo, el arabe solto la tipica broma que se le dice a un israeli cuando se le ve en otro pais: porque matais a mi gente?, de verdad que lo dijo medio de broma, pero nos parecio salido de tono. Y de ahi derivo a que si Israel se cree demasiado, etc. Menos mal que cogia el bus que iba a Cambridge y no el de Oxford.
Metemos las bicis en el maletero del bus, pagamos 10 libras por ida y vuelta abierta. Llegada a Oxford en 1 hora, coger bicis, y para el tren. Pagamos 50 libras por el billete ida y vuelta a Cardiff, con cambio en Didcot, que me suena a palabra obscena. No sabemos como llevar las bicis, primero las metemos al lado de la puerta, el tren va medio vacio. Luego, hasta Cardiff, tienen un trozo de bagon para las bicis, en teoria dicen 4 pero caben mas.
Llegamos a Cardiff, foto con la estacion y a ver por donde empezamos. Miramos y hay un estadio del milenio, le pido a un señor que nos haga una foto y me dice que vale, se queda quieto y me mira fijamente. Se lo vuelvo a pedir y me dice que ok. Llegados a este punto no me queda mas remedio que hacerle una foto.
El castillo mola, tiene varias torres y parece un plato de pelicula mas que un castillo real. La verja tiene animales asomandose y es famosa por ese detalle. Cardiff, como ciudad, pues no da para mas, y lo intenta, pero no, nunca llagara a primera division. Tiene un centro de musica, que toda ciudad que se precie tiene que tener gastandose un paston en el arquitecto de turno que le dara un toce unico y caracteristico de las raices de la ciudad donde se vaya a poner: en otras palabras, el arquitecto hace lo que le sale de los huevs. En este caso un muro con palabras que son las ventanas. Pues muy bien.
Miramos un museo de la historia de Cardiff y aun no lo han abierto, si es que somos unos descubridores prematuros. De ahi empieza la diversion para nuestras piernas, las avisamos de que no van a descansar en tres dias. Lo primero es salir de Cardiff, pues siguiendo el gps es facil subidas, bajadas, a la salida de Cardiff nos desviamos y vemos una playa de rocas, que dentro de lo que uno entiende por playa (vease costa del sol española, o punta cana) pues tiene su encanto. Y las casas enfrente con ventanales enormes me quitan un poco la ilusion de que vivo en la mejor casa del mundo con mi rio propio y todo.
Continuamos y llegamos al pueblo mas feo del mundo, o igual es que hemos entrado por la parte industrial. En este momento observamos nuestro objetivo que nos ayudará a medir nuestras fuerzas, un trabajador que sale de trabajar y va en bici. Pienso, y seguro que Yoav tambien, si no deberiamos de ir mas despacio para no humillarle en su propia casa. La verdad es que el hombre no se deja alcanzar, lleva las botas de seguridad de punta de acero, se enciende un cigarrillo, se lo fuma, saludo a una furgoneta con compañeros, y aun asi vemos con tristeza que se aleja, cada vez mas y mas, y no podemos hacer nada por alcanzarle. Muy triste, si.
Tras subir un bordillo, Yoav se da cuenta que la bici no levita sola y que la idea es darle un pequeño impulso al manillar para subir bordillos, pues se queda sin rueda, parece pinchada, pero la metemos un poco de aire, y parece que podemos tirar al menos hasta la primera gasolinera. Y continuamos. La idea es coger una calle que nos sacara del pueblo, se llama Trinity St. como el colegio mas antiguo de Cambridge. Al ver la pendiente decidimos que la humillacion con el obrero es suficiente por hoy. Pasamos a la siguiente calle, Canon St. y es pero, decidimos que somos hombres con pelo en pecho y musculos en piernas, y que podemos. Pues si, pudimos casi morir del inteneto, pero llegamos arriba. Esto parece San Francisco. Como para que los Normandos invadieran Gales, ni ganas.
Llegamos a la gasolinera, y por supuesto vemos sin sorprendernos un cartel de fuera de servicio en el aire. Es un Co-operative, una tienda que tiene lo de todas pero mas cara, la gracia es que siempre me la encuentro cuando salgo o entro en los pueblos. Preguntamos, super amables no dicen varios hoteles, son las 7 y esta anocheciendo. Nos preguntan que de donde somos, una sorpresa, en inglaterra pasan de los giris, vamos, que es normal y no te prenguntan.
La posibilidad de una granja vale 60 libras. Un Loedege o algo asi, que es cadena, vale 36. Esta claro. Cervecitas en el bar de al lado, y cena a vase de comida galesa, que es como la de todos los sitios pero en el menu ponen la palabra galesa, y listo. Lo tipico es la carne de baca cocida, que me la hacia mi madre cuando era niño, y lo cocinan en Alemania, Austria, Rep. Checa, Hungria... y basicamente en todo el mundo mundial.
A las 12 estamos cansados de hablar de politica, de guerras y de por que los britanicos han salvado a Europa varias veces, y por que los franceses son gente en la que no confiar, todo basado en veridicos datos acentuados por dos cervezas.